Categoría: Misceláneo

En primer lugar, queridos jipis, mil perdones por saltarme el chequeo del domingo. El lunes era fiesta en Madrid y se me fue un poco el santo al cielo. Pensaba dejarlo ahí, pero me han llegado quejas y ruegos por distintas fuentes y he decidido hacer un chequeo de miércoles. Más vale tarde que nunca.

¡¡Jipis!! Aquí está el chequeo de la semana, después de casi cuatro horas luchando con el blog para cambiarle el diseño. Más vale tarde que nunca 🙂 Mi semana (del 4 al 10 de marzo de 2013) Una introducción: semana tranquila y alegre. Curando pacientes como quien cura jamones, ¡¡viva y bravo!! Terminando la Guía Práctica

Mi semana (del 25 de febrero al 3 de marzo de 2013) Una introducción: semana bastante normalita. Probé a escalar un poco en el roco, ¡viva y bravo! Sin más novedades. Lo que ha ido bien: – Rehabilitando, que es gerundio, y que mi pie haya respondido bien en el roco. – Seguimos leyendo a

Aquí va mi chequeo. Hoy lo pongo tempranito para que no se me escaquee ningún jipi 😀 Mi semana (del 18 al 24 de febrero de 2013) Una introducción: me he incorporado al curro, ¡¡viva y bravo!! Mi pie está mucho mejor y casi puedo hacer vida normal. No podré escalar en un par de

Un poco tarde, lo admito, pero aquí estamos: ¡chequeo! Si quieres saber de qué va esto del chequeo dominical, echa un ojo aquí:   Mi semana (del 11 al 17 de febrero de 2013) Una introducción: sigo con mi esguince, aunque ya me han quitado la escayola. He terminado, maquetado y enviado a los jipis

Psicosupervivencia quiere ayudarte a mejorar tus domingos, y quiere hacerlo de dos maneras. La primera es mejorar tu vida en general. Si no te gustan tus domingos, no te gusta tu vida. Si los lunes te producen una mezcla entre angustia y desánimo, es lógico pensar que hay algunas cosas que deberías modificar. Aquí estamos

Por fin. Faltan cosas. Muchas cosas. Queda traducir algunas palabras de la plantilla, quizá haya enlaces que no funcionen, tengo que instalar mil plugins y seguro que se me han escapado erratas. Pero está lo importarte. O, quizá, lo importante es que está. Gracias por venir. Yo pongo el té. Tú siéntete como en casa.

Es domingo por la tarde, tengo veintitrés años y voy sentada en un autobús de camino a Granada con mi mejor amigo. Mi mejor amigo es listísimo. Como también estudia psicología, dice frases del tipo «tengo el hipocampo del tamaño de una berenjena». Vamos charlando de no recuerdo qué, y en un momento en que